El Cava es sin duda una bebida muy navideña, perfecta para brindar en cualquier celebración. Del mismo modo, los grandes reservas de Rioja son los reyes de la mesa en las grandes celebraciones protagonizadas por la mejor gastronomía, como ocurre en estas fechas navideñas. Quiero hoy romper una lanza en favor de este tipo de vinos tradicionales de Rioja, que no han gozado de una gran consideración entre los prescriptores, posiblemente afectados por la llamada “parkerización” del gusto. Frente a las modas globales, Rioja ha sido fiel a su estrategia y ha mantenido este estilo de vinos, auténticas joyas enológicas, leyendas fraguadas a lo largo de un siglo, vinos universales y únicos. Muy poquitos vinos en el mundo pueden encontrarse en las estanterías de las tiendas con un tiempo de envejecimiento tan prolongado como los tradicionales grandes reservas de Rioja. Son vinos muy selectos, ya que apenas se dedica un 3% de la producción de Rioja a este tipo de vinos, que destacan especialmente en las mejores añadas. Es sin duda en añadas excepcionales cuando esos exclusivos e inimitables grandes reservas de Rioja, elaborados con maestría por los enólogos riojanos, muestran todo su esplendor y justifican por qué para la mayoría de consumidores siguen siendo el paradigma del vino de calidad y ocupan un lugar de honor en la historia vinícola española. Algo que también la crítica especializada esta reivindicando de nuevo, tras un periodo en que estos vinos clásicos y “aristocráticos” por antonomasia habían sido eclipsados por los vinos vanguardistas.
Y es que “el vino de calidad permanecerá por los siglos, al margen de modas y conceptos”, como afirmaba Bartolomé Sánchez en la revista “Mi Vino”. Para este autor, “estos vinos riojanos tradicionales, con su perfumado bouqué, sus equilibrados y aterciopelados sabores, han satisfecho paladares de todas las capas sociales y siguen deslumbrando a millones de españoles”. José Peñín definía en “Sibaritas” al Gran Reserva como “el modelo tradicional riojano que ha dado renombre internacionalmente a la región” y que representa “un estilo particular e histórico de Rioja”. Este crítico proclamaba el “retorno a los clásicos, a nuestras viejas glorias más consagradas, que son un patrón para el resto de los vinos de Rioja y referente de los vinos envejecidos en el mundo”. El propio Jay Miller, “paladar” de Parker para los vinos españoles hasta que le despidió el pasado año, confesaba haberse sentido impresionado por los grandes reservas de Rioja, describiendo muy gráficamente que “había probado un vino de su misma edad (añada 1945) y lo había encontrado mejor que él”. El crítico americano declaró que “una de las grandes fortalezas de Rioja radica en sus reservas y grandes reservas”, una tradición y especialidad que a su juicio “no se debe perder”.
Otros periodistas especializados de renombre que escriben para algunas de las publicaciones más importantes de Estados Unidos también se han percatado de esta demanda de los consumidores por los vinos de Rioja de estilo más clásico. El pasado mes de octubre Wine Spectator dedicó a los vinos de Rioja la portada y varios artículos escritos por Thomas Matthews, el editor jefe de la revista, para quien “a través de los años, Rioja ha amasado una gran reputación como resultado de años de innovación e inversiones durante el siglo XIX, y es durante ese tiempo que se elaboró un vino que es ahora llamado clásico y que ha dado como resultado un tipo de vinos de corte fino y con unos matices excepcionales y únicos en boca a tabaco, frutas secas y especias”. Por otra parte, el crítico de vinos del New York Times, Eric Asimov, argumentó recientemente cómo los grandes reservas han ganado la partida a la tendencia de estilo a nivel mundial de vinos de intenso color, cargados de fruta y con mucho alcohol: “Estos agradecidos y elegantes vinos han conquistado la sensualidad, a través de un irresistible sabor en boca que te invita a saborearlo sorbo tras sorbo, y también la intelectualidad, a través de matices difíciles de alcanzar en otros vinos”. En el periódico más leído en Internet en Estados Unidos, The Huffington Post, Richard Jennings afirmaba que Rioja es la región que ofrece más calidad por el precio de cualquier otra región en el mundo: “Para aquellos consumidores que busquen vinos envejecidos sin tener que pagar precios desorbitantes, la región que ofrece la mejor calidad de este estilo de vinos es Rioja”.
Les invito a brindar en este fin de año con un gran reserva de Rioja por el nuevo año 2013, para que se haga realidad que ningún tiempo pasado fue mejor, pues lo mejor está aún por llegar. Incluso en el vino.